La licencia de navegación, anteriormente conocida como titulín del barco, es el título náutico básico que permite a los navegantes gobernar embarcaciones de hasta 6 metros de eslora y motos de agua sin límite de potencia. Para obtener esta licencia, no solo es necesario superar un curso teórico, sino también completar una formación práctica que es esencial para garantizar que los nuevos navegantes estén preparados para enfrentarse a las situaciones reales que pueden surgir en el mar. Este artículo explora la importancia de la formación práctica en la licencia de navegación, destacando cómo esta formación ayuda a desarrollar las habilidades necesarias para una navegación segura y eficiente.
La importancia de la formación práctica en la licencia de navegación
